Pointer Madrid me encanta, sobre todo por el lugar y el buen ambiente que hay los fines de semana, sobre todo los viernes.
La comida también es muy rica aunque no tienen tanta variedad, la carne es muy rica y también los ravioles, pero lo mejor de ahí son los postres, el cronut con Nutella y helado de vainilla y la tarta con helado.
Para este lugar siempre hay que hacer reservación si es en fin de semana en la noche porque nunca hay lugar, lo mejor es cenar en la parte de abajo del restaurante porque es ahí donde se convierte en bar cuando dan las 12 y te dan unos fueguitos. El lugar es padrísimo y tiene el mejor ambiente.